Cósmicos Despertares

Los antiguos alquimistas sabían que a un metal si se lo calentaba en al temperatura justa se le podía dar forma porque posee características de maleabilidad.
El fuego de la voluntad puede hacer en nosotros que nuestra mente se vuelva maleable es decir darle la "forma" necesaria para sortear los óbstaculos que la vida nos ofrece como enseñanza, porque recuerda: "Todo en la vida es enseñanza", siempre hay algo para aprender, hasta aquello que pensemos que es "negativo" tal vez en sus profundidades no lo es.
Si nuestra mente se vuelve rígida, al igual que los metales se rompe, porque se desgasta porque se estresa, otro ejemplo que nos da la naturaleza es el bambú que a pesar de los fuertes vientos no se quiebra, sino danza con el, produciendo el movimiento necesario, danza con el Tao, estando dentro del Tao.
Es por eso mi querido/a caminante el camino se hizo para andar y no para detenerse, caminar en la acción reflexiva de cada paso, de cada momento, tratando de tener fe pero no una fe ciega, sino una fe con conocimiento, que te dará la fortaleza en cada momento.
Todo es una maravillosa Alquimia, una Química Divina que trasciende y nos trasciende, solo hay que descubrirla dentro y fuera nuestro, porque somos un microuniverso, dentro de un macrouniverso, y en el centro recuerda esta el Yo testigo.
Hoy alguien cercano me pregunto: ¿cuál es el sentido de la Vida? y contesté: el sentido de la Vida es ser testigos del Milagro, el Milagro de poder dar testimonio de la Vida que va más allá del tiempo medido por nuestros relojes mecánicos, porque es Eternidad, ya que nosotros somos Eternos, solo hay que descubrirlo.