Somos la proyección del pensamiento del Espíritu, nuestro cuerpo físico o vehículo corporal es el traje espacial que nos habilita a realizar una nueva experiencia en este planeta Gaia, el ADN que le da conformación a cada célula deviene de una Memoria Eterna y Absoluta, el alma encarnada en dicho cuerpo corporal puede realizar día a día, momento a momento vivencias que se van acumulando en el inconciente, como alguna vez lo nombro mi Maestro Oscar Badolato: el Gran Archivador.
En el quedan todas esas impresiones, ahora ¿es posible recordar cada una de esa vivencias?, por supuesto, mediante un trabajo continuo se pueden ir extrayendo información, para poder de algún modo saber ¿Quiénes somos? y ¿Qué somos?, para ¿Qué estamos?, esto sin lugar a dudas nos habilitará a ser mejores humanos.
Siento con toda mi alma que es el tiempo de revalorizarnos como seres encarnados en estos cuerpos físicos, si de alguna manera queremos elevar evolutivamente esta sociedad que vivimos, enferma la misma, no es un comentario negativo, sino observante de la realidad actual.
Imagínate si un pulmón le dice al otro: mira yo soy mejor que vos por lo tanto me toca más aire que vos, ocurriría un caos en nuestro cuerpo, lo mismo ocurre en la sociedad, la vanidad de vanidades que hoy se vive es como un gran cáncer, que solo a través del Amor podrá ser extirpado.
Piensa pero mas que pensar hay que sentir, porque a través del sentir en bien has de trascender al bien, es el tempo de RENACER a una nueva vida, diferente y más posible. Que así sea para todos.
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